miércoles, 25 de diciembre de 2013

Navidad :)

Queridos Exes,

Quiero tomarme esta entrada para desearles una feliz Navidad, ojalá con la gente que quieren.

También quiero aprovechar de agradecerles su apoyo ¡Cada vez más gente lee las aventuras de esta ex, y en más países! (Colombia, Malasia, Rusia, Reino Unido)

Así que gracias por leer, comentar y difundir :)

Que tengan felices fiestas y disfruten el final del año.
Nos seguiremos encontrando, no se preocupen ;)

xoxo

Liberty.

PS:


lunes, 23 de diciembre de 2013

El Encuentro - Parte 6: Felicidad


Algo que nunca voy a poder negar de Baz, es que es una persona considerada.
Y preocupada.
Y cursi (como ya dije), pero considerado y preocupado, definitivamente.

La cosa es que mientras hacíamos un barrido conversacional acerca de la familia y nuestros amigos en común (Tali y Myla), inevitablemente tuvimos que tocar el tema de las relaciones que tuvimos después de terminar.
En verdad no sé si era inevitable, pero a esas alturas y con un rico chocolate caliente en la mano, daba como lo mismo.

Baz: ¿Qué pasó con ese pololo que tuviste... justo después de mí?

Liberty: ¿Ese? (D3) Ni siquiera merece que le digan "pololo"... no era nada...

B: O sea, era como... ¿como qué?

L: Como un amigo con ventajas sin ventajas.

B: ...

L: Da lo mismo, no cuenta.

B: Ok... pero ¿fuiste feliz con él?

L: No, no sé... es que como que no era mi pololo en verdad. O sea se supone que sí era, pero nunca fue como un pololo... ¿cachai?

B: Sí... creo... pero y con "Ingeniero Sin Nombre" ¿fuiste feliz?

L: Sí... o sea, no siempre. Pero de los 5 años obvio que hubo tiempos... períodos felices.

Y eso me puso a pensar.
Es verdad que había sido feliz con "Ingeniero Sin Nombre", pero la verdad es que ya al final de la relación, lo único que podía repetirme antes de dormir era "No soy infeliz". 
Y después me pregunté: ¿Por qué tengo que conformarme con no ser infeliz en vez de con ser feliz?

Con Baz fue algo parecido.
Nunca dejé de quererlo, pero con él tan lejos siempre era difícil ser feliz.
Creo que con Baz fui más feliz, aunque estuvimos mucho menos tiempo juntos.
Quizás si hubiésemos estado más tiempo juntos habríamos pasado momentos de infelicidad.
O no.
Quiero pensar que no.

Don't worry, be happy!

sábado, 21 de diciembre de 2013

Requisitos

En algún lado leí que lo más estúpido que le puedes decir a alguien cuando terminas, es "nunca vas a encontrar a nadie como yo y te vas a arrepentir de haberme dejado".
O algo por el estilo, estoy parafraseando. 

Y en verdad, si terminas con alguien, es como obvio que quieres a alguien nada que ver con esa persona.
O por lo menos, es la conclusión a la que llegarían muchas personas.

En mi caso con Baz, me acuerdo de haber escrito en mi diario de vida (más de una vez después de que termináramos) "si encuentro a alguien que me quiere un décimo de lo que él me quería, se podrá decir que tengo suerte" (me estoy parafraseando)

Y aunque claro, después del D1, el D2 y el D3 (el trío Despreciable, Los Despreciables al cubo o como prefieran llamarlos), pensé exactamente eso: si me toca otro más así, chao con los hombres; en realidad no podía evitar pensar que no me molestaría encontrar a alguien como Baz.
Pero que no quisiera irse a miles de kilómetros de mí por algo tan abstracto como "querer descentralizar la educación superior" (cada vez que lo escribo, más ridículo me parece).

A estas alturas, me conformaría con alguien que me quiera.
Así de sencillo.
¿Qué más se puede pedir, en realidad?

Me acuerdo de cuando era chica, estamos hablando de cuando tenía 11 ó 12... ó 15 ó 16 (no se burlen), hacía listas larguísimas de cómo sería mi hombre ideal.
Listas que estaban llenas de puras cualidades innecesarias.
Una era: que sus ojos no estén ni muy juntos ni muy separados. ¿Cómo podría eso influir en si un hombre es o no buen pololo?
Otra cualidad: Que pueda levantarme en brazos. ¿POR QUÉ? O sea, sí, es un plus... pero ¿por qué pensaba yo que era tan importante como para ponerlo en la lista?

Menos mal que maduré y puedo reducir mi lista de requisitos a las siguientes:

1. Que me quiera (primordial)
2. Que sea más alto que yo (negociable, pero preferible)
3. CERO homofobia (deal breaker)
4. Que no fume (ni ahí con andar agarrando con un cenicero)

Esa es mi lista.
Cómo he madurado...

miércoles, 18 de diciembre de 2013

El Encuentro - Parte 5: Ser o no ser

Debo confesar que, aunque no fue incómodo pasar la tarde con Baz tomando chocolate caliente y conversando de la vida, no sé por qué las cosas no se sentían tan naturales como antes.
Quizás porque hacía 5 años que no nos veíamos...
O quizás porque somos exes ahora.

La cosa es que los gestos más pequeños, se me hacían muy familiares.
Cosas tan sencillas como que se negó a que yo pagara mi café (chocolate caliente), o la forma en que se arregló la polera para despegársela un poco del cuerpo.
Ese tipo de cosas me llevó directo al 2004.

Pero había algo más que eso.
No era sólo que reconociera en esos gestos al Baz de 17 años que fue mi pololo.
Era como si esas cosas también lo hicieran ser MI Baz.
O el que era cuando estábamos juntos.

No tengo cómo saber si esos manierismos se mantienen con otras personas.
Pero parte de mí quiere pensar que no.
Que es así, cuando estamos juntos.
Que volvemos a tener 17.

Nostalgia...

domingo, 15 de diciembre de 2013

Error 404 - "Sexo" NO encontrado

OK.
Ya me han comentado (más de una vez) que a mi historia con Baz, contada en este humilde blog, le falta sexo.
Pero déjenme aclarar algo: no hay sexo en el blog de mi relación con Baz, porque no hubo sexo en mi relación con Baz.

Lamento mucho si esto decepciona a algunos (o a muchos.. o todos los que leen estas anécdotas), pero no puedo cambiar lo que pasó.
O, en este caso, lo que no pasó.

No voy a mentir, creo que ganas no nos faltaban.
Es decir, a los 17 las hormonas se revolucionan por todo (¿o no?).
Pero simplemente nunca fue como: "ya, hagámoslo".

Viéndolo en restrospectiva, quizás deberíamos haberlo hecho.
Sobre todo porque, re-leyendo mis diarios de esa época y registro audiovisual que espero haya muerto cuando Tali cambió su celular, pasé mucho tiempo repitiendo "debí haberlo hecho con Baz cuando pude".
Tal vez debería haberme olvidado de todo: de que teníamos 17, de que íbamos a vivir en ciudades separadas; y simplemente haberme tirado encima de él cuando pude.

Me acuerdo de haber pensado en dos posibilidades:
a) Si teníamos sexo, entonces iba a fortalecer nuestra relación e iba a ser más fácil estar separados.
b) Si teníamos sexo y no nos veíamos en meses, quizás él iba a buscar con quién hacerlo mientras estuviéramos separados.

Debo admitir que ninguna de las opciones me convencía demasiado para decidirme.
Pero creo que hasta el día de hoy, no logro recordar la objeción que nos hizo abstenernos.
Yo dejé de lamentarme hace años... me pregunto si alguna vez él se habrá lamentado por lo mismo...
Oh well...

jueves, 12 de diciembre de 2013

El Encuentro - Parte 4: ¿Incómodo?

Ya llevábamos un rato conversando (aunque podrían haber sido 5 minutos o menos), cuando se me ocurrió la brillante idea de preguntarle a Baz por qué me había pedido que nos viéramos.

Liberty: O sea, han pasado... ¿5 años? 5 años desde la última vez que nos vimos...

Baz: ¿Por qué crees tú que te dije que nos juntáramos?

L: No sé... ¿Porque podemos? Para ser honesta, se me ocurrió que seguramente habías terminado con tu polola y por eso ahora "podemos" juntarnos... no sé ¿me equivoco?

[Sí, hablo así... mando a la mierda mi gramática y soy un poco dispersa ¡a que no se lo esperaban!]

B: Más o menos... o sea... no.

L: ¿No me equivoco?

B: Lo que pasa es como Myla se viene  a Santiago, quería que vieras que no hay mala onda entre nosotros... yo no tengo problemas en estar en el mismo lugar que tú...

L: Ehhmm... yo NUNCA he tenido problemas en verte... nunca, ninguno... o sea, ni siquiera cuando estaba con mi ex (todavía no tiene seudónimo... ¿sugerencias?)... perdona que te diga, el problema nunca fue mío (sonrisa empática)

B: O sea... yo no... (lo piensa)... bueno, da lo mismo... la cosa es que pensé que era buena idea... no sé, vernos y ver que no es incómodo.

L: Ok... pero es que nunca ha sido incómodo... ¿ha sido incómodo?

B: ...

L: La última vez que nos vimos fue hace 5 años, en mi casa, porque querías ver a Tali y ella estaba en mi casa... entonces fuiste para allá. Y cuando te llamó la que supongo era tu polola le dijiste que estabas en TU casa... 

B: ...

L: Asumo que a ella no le gusta la idea de que nos veamos...

B: ...

L: Y si estamos aquí ahora, en público tomando café (chocolate caliente), asumo que o ella cambió de personalidad o ya no es parte del tema...

B: La cosa es que no es incómodo.

L: No... nunca fue...

[Silencio incómodo mientras los dos tomamos largos sorbos]

lunes, 9 de diciembre de 2013

Mejor sin ti

Me acuerdo de un verano en Puerto Natales, estaba trabajando en el negocio de mi papá y madrastra sirviendo mesas, haciendo gala de los idiomas que manejo (modestia aparte), tratando de olvidarme de otro Despreciable que me había rechazado.

Ese particular despreciable, se hacía el interesante, pero yo seguía interesada.
No sé por qué.
La cosa es que después de haberle plantado un beso, me dijo que en verdad no quería nada.
Encontré que la salida fácil agarrar mis cosas, e irme de Santiago aprovechando las vacaciones, y trabajar sirviendo mesas a adorables turistas con variados acentos.

La cosa es que, en verdad no sé por qué, me pasé ese verano pensando en Baz.
Quizás porque en realidad, cuando alguien te rechaza, piensas en alguien que no lo hizo.
Y para mí, ése era Baz.

Si voy a mi diario de vida de ese entonces, me paso páginas y páginas y más páginas, preguntándome si Baz era the one, y comparo el amor podríamos haber tenido, con otros grandes amores de la historia.
Pero claro, nunca fuimos Romeo & Julieta, Antonio & Cleopatra o Brad & Angelina.

Sólo éramos nosotros.
Bazerty.

Y la cosa es que, mientras estaba acomodando unos bombones en la vitrina, comenzó a sonar en la radio la canción "Mejor sin ti" del grupo español (tal vez ya muy añejo o incluso olvidado) Ella Baila Sola.
Pensé en la letra, pensé en Baz y pensé "No... mejor sin ti... no".
Creo que me fui a llorar al baño (por mi dignidad, quiero pensar que así fue), pero hay altas probabilidad es que me haya desmoronado ahí mismo, entre las mesas 2 y 4, mientras una adorable pareja alemana me miraba.
Me inclino por la primera opción.

Y desde entonces, no dejo de preguntarme si estaría mejor CON Baz que SIN él.


sábado, 7 de diciembre de 2013

El Encuentro - Parte 3: Matón Reprimido

Algo que deben saber de Baz, es que no mata una mosca.
O por lo menos eso recuerdo. Literal.
Abría la ventana y esperaba horas a que saliera, pero no era capaz de matarla.

Cuando empezamos a conversar sobre el bullying en los colegios (porque estoy haciendo la práctica en uno), empezamos a hablar de ex-compañeros de colegio (otro tipo de ex, supongo), y de cómo mucha gente nos caía mal de presencia (y otros nos caían mal porque eran [son] unos estúpidos, desperdicios de seres humanos... ya llegaremos a eso).

Por algún motivo, de pronto Baz dice:

Baz: Creo que en el colegio fui como un matón reprimido.

Casi me ahogo con mi chocolate caliente, de la risa.
¿Baz un matón reprimido?
¿Baz?
¿Mi ex Baz?

Liberty: Tú... un matón... ¿tú? ¿reprimido?... ¡nunca mataste ni una mosca!... ¿matón? ¿¡Tú?!...

Reemplazar todos los [...] con risas descontroladas poco decorosas.

En realidad no me cabe ninguna duda de que de ser necesario, Baz habría golpeado al que se lo mereciera.
Pero de ahí a ser un matón... es como decir que yo soy seria... u ordenada...


miércoles, 4 de diciembre de 2013

Más importante

A veces mientras re-leo algunas de las entradas que ustedes, queridos lectores, ya han revisado, no puedo evitar preguntarme qué hizo que Baz fuera mi primer pololo "importante".
Porque no fue mi primer pololo, en realidad.

Mi primer pololo, el Despreciable 1, como ya recordarán, llegó a mi vida cuando teníamos 15 años, y era un desastre.
Mi mamá todavía lo llama "la pesadilla de toda madre", y no la culpo.

Mi segundo pololo, D2, llegó un par de meses después de que las cosas con el D1 se fueran a la cresta.
Y las cosas no fueron mejor.
De los 4 meses que estuvimos "juntos", sólo nos vimos algo así como 35 días... un desastre.

Pero 2 años después, llegó Baz.
O sea, no llegó (estuvo ahí, en mi curso, desde 1998), pero de alguna manera se manifestó mi interés por él.
Pero aún así, ¿qué lo hace importante?
¿Que estábamos en cuarto medio?
¿Que teníamos 17?
¿Qué cosa?

Porque al final ¿qué hace que alguien sea importante, un pololo, un amigo, etc?
Lalo es importante, Myla es importante, Tali es importante.

Lalo es importante porque fue mi primer amigo... ever, así de toda la vida.
Myla es importante, porque fue la primera buena amiga que hice después de que me quedé casi sin amigos.
Tali es importante, porque se transformó en alguien que siempre está ahí. 

¿Qué hizo a Baz importante?
Mmmmmmmmm creo que todavía me lo estoy preguntando...

lunes, 2 de diciembre de 2013

El encuentro - Parte 2: Háblame de Baz con zeta

Debo confesar que cuando Baz me dijo esto, me quedé "plop!".
Claramente era su manera de preguntarme por la versión que había inventado de él para este blog.
Y fue casi como decirme: "Háblame de mí".
Obviamente no iba a mentirle, de modo que le dije: "Ok... Baz eres tú".

Por un momento pensé que no le había gustado siquiera la idea de este blog (la verdad es que no tenía idea de que lo leía), y que quizás se había enojado.
Lejos de eso, la conversación que siguió fue algo así:

Baz: Y... pero... ¿qué te llevó a la idea de...?

Liberty: No sé, en verdad... un día como que me inspiré y me largué a escribir.

B: ¿Y por qué sobre mí... nosotros?

L: No sé, me pareció que mi relación con X (ingeniero que vino después de Baz) era demasiado reciente, pero escribir sobre ser una eX es algo con lo que la gente se puede relacionar. MI relación contigo terminó hace caleta, entonces pensé que era más fácil sacar ideas de ahí...

B: (sonriendo) Me siento honrado.

L: :)

Todas las características que he dado de Baz, son verdaderas.
O por lo menos, son así como las recuerdo de esa época. 
No me cabe duda de que Baz ha cambiado un montón, aunque cuando nos vimos no pude realmente notar ninguna diferencia significativa.
Seguía siendo el mismo Baz de siempre.

*ForeverBaz* 

viernes, 29 de noviembre de 2013

El Encuentro - Parte 1: Lo vi llegar...

Lo admito: me cambié 3 veces de ropa, y me preocupé de maquillarme de la forma más natural posible antes de salir de mi casa.
Y confieso que me tembló un poco la mano cuando quise ponerle llave a la puerta.
En la micro, me concentré en la canción que salió al azar en mi reproductor (ya bueno, lo admito: es un iPod) y eso me ayudó a calmarme un poco y bajar el nerviosismo. 

Llegué a la hora a acordada y me senté en una mesa cualquiera.
Cuando vi a Baz acercarse , juro que me sentí como si tuviera 17 años de nuevo.
No sólo por la sensación de esperar para verlo; si no también porque se veía exactamente igual que cuando teníamos 17. Juro que Baz no envejece.
(Dicho sea de paso, creo que yo tampoco pero supongo que quedará para que futuras generaciones lo decidan)

No pude evitar que mil recuerdos se me vinieran a la mente. Cuando yo le abría la puerta de mi casa y lo veía subir los peldaños de la entrada.
Cuando le abrían la puerta y sentía sus pasos por el pasillo.
Fue como volver al 2004 de un paraguazo. 

A medida que se fue acercando, por unos minutos todo lo vi en cámara lenta.
Me saqué los audífonos, sonreí y nos saludamos. Se sentó frente a mí y ese fue sólo el comienzo de una interesante tarde.

Les dejo la canción que finalmente logró calmarme.
Gracias, Europe.


martes, 26 de noviembre de 2013

(e)Xbox

Cuando digo que tengo una exBox, es eso: una caja donde tengo todo lo que tiene que ver con los eX. 
Mucha gente (en su gran mayoría hombres) me miran con cara de incredulidad. ¿Qué mujer tiene una eXboX? O sea, supongo que muchas. Pero si me conocieran (y creo que en cierto nivel ya lo hacen), no soy esa mujer. 

La verdad es que mi exBox, sólo tiene algunas cosas de Baz.
Básicamente porque el pololo que vino después de él ocupó mucho tiempo de mi vida, por lo que actualmente ahora ocupa gran parte de mi bodega.

Pero la última vez que abrí mi exBox, había un par de regalos que Baz me había hecho, y muchos no había querido usar porque lo encontraba nada qué ver.

Me acuerdo de haber revisado la caja por todos lados, buscando una carta que Baz me había escrito, justo antes de que él se fuera a Concepción y yo me viniera a Santiago.
Pero no la encontré.
Y después me acordé: el ex que vino después de Baz, me pidió que la botara o la quemara, porque nunca entendió para qué la quería conservar.

No voy a mentir que me arrepiento de haberla quemado:
1. Porque casi quemo un paño de cocina en el ritual.
2. Porque ese tipo de cosas vale la pena guardarlas para después. Aunque sea por valor sentimental, para recordar lindos momentos.

Así que Baz, si estás leyendo esto: lo siento.
Me habría encantado conservar tus (románticas y un poco cursis XD) palabras.

sábado, 23 de noviembre de 2013

Inocente café

Algunos dirían que eso no existe: "Inocente café" es un invento de la gente.

Pero en este caso, juro que es un café y nada más, en un lugar público a plena tarde.
Todo empezó con un sueño (típico), donde estaba Baz (obvio), y no me pude resistir al impulso de mandarle un whatsapp que decía (literalmente) "Hola! anoche soñé contigo, y sólo quería chequear que estás bien :)". Nada demasiado eufórico, porque siempre había vivido bajo la creencia de que su polola era un poco psycho. (Aunque tal vez sólo estaba en mi cabeza, queriendo pensar que me odiaba sin razón... sin razón) 

[En realidad no la conozco, quizás sea encantadora, ¡quizás incluso podríamos ser amigas!... or not]

Lo que no me esperaba era que la conversación siguiera y siguiera, y quedara en una invitación a tomar café por ahí.
De él a mí, él lo sugirió.
Un inocente café. 

Ahora, sólo quiero aclarar lo siguiente: NO ES UNA CITA.
Por mucho que mis amigas (Tali y Myla) insistan en que sí lo es. 

Mi predicción es la siguiente: Tomar café, ponernos al día, y más que seguro sacar más entradas para contarles.
Y punto.
O bueno, tal vez sea un inocente chocolate caliente, depende de cómo vaya a estar el clima.
¡Los mantendré informados!
10-4

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Hacer Lala

En el 2004 (el año de Bazerty), se dio a conocer la cantante Ashlee Simpson (hermana de Jessica Simpson), y su segundo single fue "La la". Que en verdad no decía mucho, salvo el coro: "You make me wanna la la".
Con Baz lo tradujimos como "Me hacer querer hacer la la".

Me acuerdo de haber pasado horas y horas conversando con Baz sobre lo que podría significar "hacer la la".
¿Cuándo uno hace la la?
¿Cuándo no se podría hacer lala?
¿Es bueno hacer la la?

La verdad es que no estoy demasiado segura, pero creo que quedamos en que "hacer la la" podía ser como un eufemismo de "hacer feliz".
Así como "tú me haces ser feliz". O algo así.

No sé, igual me acuerdo de Baz cada vez que escucho la canción.
Que es quizás una vez al año (creo que ya no es tan popular).

¡Les dejo la canción!
¿Qué creen ustedes que sea "hacer la la"?


lunes, 18 de noviembre de 2013

Feliz Cumpleaños...

... ¡Tali!
Oh sí, hoy mi querida amiga Tali cumple X años.
Normalmente lo diría, pero no estoy segura de que pueda abiertamente hablar de la edad de mi amiga.

Esta no es la primera (ni será la última) vez que pasemos su cumpleaños en ciudades diferentes.
Ella está en Punta Arenas y yo estoy en Santiago.
Yo estoy aquí y ella está allá.

:( oh.
De pronto me bajó toda la pena.

Y es que todavía me acuerdo de cuando celebramos su cumpleaños en su departamento en Santiago (y el mío también, dicho sea de paso), con globos y torta y gorritos y serpentina.
Creo que al final no llegó mucha gente, pero yo hice todo lo posible porque lo pasáramos súper (sobre todo Tali, en su día).

Así que espero que donde sea que celebre su cumpleaños esta vez, la traten como se debe, y la atiendan como se merece :)

¡Te quiero, amiga! :D

viernes, 15 de noviembre de 2013

Patrones

Honestamente, a medida que iba creciendo y teniendo experiencias de vida, nunca pensé que tenía realmente un "tipo" de hombre. 
Excepto claro, el que está ultra herido y uno quiere rehabilitar.
Basura.

Pero cuando de pronto te sientas analizar las mentes de los hombres con los que alguna vez tuviste una relación (un relación, no relaciones; no malinterpreten la dulce alma de quien escribe) a veces se pueden encontrar ciertos patrones.

En mi caso, el patrón fue fácil de descifrar: INGENIEROS.
Me encantan los ingenieros, esos bien mateos, idealmente con lentes y bien cuadrados (ellos, no los lentes). Para poder descuadrarlos un poco.
No lo puedo evitar, me fascinan los con pinta de nerd.
Aunque supongo que ahora también podríamos llamarlos hipsters. ¿O es eso too mainstream?

La cosa es que Baz es ingeniero, y yo estudié Literatura (sí, con L mayúscula).
Y eso funcionaba.
Cuando terminamos, empecé a preguntarme qué tipo de hombre llegaría a mi vida.
Sorpresa: un ingeniero (aún sin seudónimo, se aceptan sugerencias).

Pero no fui la única que repitió un patrón: la polola de Baz es (redoble de tambores) Licenciada en Literatura.

¿Coincidencia?

Supongo que quedará para las futuras generaciones a decidir.
Pero creo que los patrones son simplemente colchones sobre los que nos acostamos emocionalmente durante nuestras relaciones (intrerpersonales, no confundir) para sentirnos cómodos.

Los ingenieros son mi colchón.

martes, 12 de noviembre de 2013

Myla

Supongo que no pensaron que mis únicos amigos eran Lalo y Tali.
Porque también estaba Myla.
Y Myla había estado ahí (y sigue ahí... aquí) desde primero medio cuando nos conocimos a la tierna edad de 14 años, antes de Baz, antes de Tali incluso (pero después de Lalo)

Debo decir que Myla llegó a mi vida en el momento justo, cuando necesitaba urgente una amiga.
Digamos que Lalo había estado siempre, pero no era suficiente. Sobre todo a esa edad.

Myla llegó justo antes de que los hombres se transformaran en un tema.
Y aunque nuestra amistad se reforzó después de que terminara con el primer pololo que tuve (llamémoslo "El Despreciable 1", D1 para abreviar), estuve muy contenta de poder contar con su amistad de ahí en adelante.

Me acuerdo de que una vez la mamá de Myla me dijo "ella siempre va a ser leal contigo, porque he visto cómo se tratan y como ha crecido su amistad".
¿Saben qué? Tenía razón.

Lo crean o no, las únicas peleas que he tenido algunas con Myla, fueron por... (adivinen) ¡BAZ! (¿adivinaron?) y fueron justo después de que termináramos.
Lo que pasa es que (curiosamente), mis amigas también eran amigas de Baz.
¿Coincidencia?
Tal vez él se hizo amigo de ellas para poder acercarse a mí (chan chan chan) o tal vez no. Nunca lo sabremos.

Pero años después de que Bazerty se acabara, puedo decir que Myla sigue a mi lado.
Y de Baz.
Pero a veces me gusta pensar que está secretamente alentando más al team Liberty.

Love you, Myla!

domingo, 10 de noviembre de 2013

Tatuaje

Tengo 3 tatuajes (sorpresa), que me he hecho en un período de 4 años, y estoy segura de que habrá más a medida que pasa el tiempo.
Siempre quise tener al menos uno.
Cuando estaba en el colegio me dibujaba los brazos, y todos los veranos me hacía tatuajes de henna, esperando poder cumplir la edad legal para hacerme uno de verdad.

Obviamente mi mamá fue la primera en saltar diciendo que me iba a dar SIDA (siempre) y que si me iba presa me iban a poner en la misma celda que los asesinos y violadores.
Porque obvio, yo iba a cometer un crimen, y obvio, me iban a meter en una cárcel de hombres (lógico).

Dejando todos los prejuicios aparte, no me hice un tatuaje hasta los 22. Ya estaba segura, y había pasado horas metida en google buscando una imagen que de verdad me convenciera.
Así que fui a un estudio sugerido por una prima (a la que aproveché de conocer en el local),y ella me acompañó mientras nos conocíamos durante las dos horas que se demoraron en hacer permanente la tinta en mi espalda.

Confesión: No pude evitar acordarme de Baz.
Me explico: Cuando estábamos pololeando, un día X empezamos a conversar sobre los tatuajes y lo que nos haríamos. Yo nunca dije nada definitivo, porque nunca lo había pensado realmente (sólo sabía que quería un tatuaje).
Pero Baz lo tenía súper claro: me habló de un mito nórdico en el que a alguien (quizás haya sido Thor, pero no quiero perderme en estereotipos) lo bañaban en líquido de inmortalidad, pero justo le caía una hojita de un árbol en la espalda, y ese era su punto débil.
Era como la versión nórdica de Aquiles, supongo.
Entonces Baz quería tatuarse esa hoja en la espalda.

Creo que nunca lo hizo, en verdad no lo sé.
Y cuando realmente lo pienso, encuentro que una hojita es como... no sé, una mariposa.
¿Tiene sentido? En verdad, mejor si no se hace nada, además que en su espalda (el hombre era MUY alto y ancho de hombros) seguramente parecería un lunar amorfo.
Oh well...


NOTA: lo busqué en wikipedia y no es Thor, fue Sigurd. Y se baña en sangre de dragón, lo que lo hace invulnerable, pero no inmortal.

viernes, 8 de noviembre de 2013

Marcador

Pasa algo extraño después de que se pololea con alguien, se termina, y después se empieza a pololear con otra persona.
Muchas veces se siente como si la primera persona en pololear después del quiebre, ganara.
1 - 0.
En nuestro caso, gané yo. Pololié primero.
Liberty 1 - Baz 0
Pero, resultó siendo un asco de pololo (el peor de la historia, tan malo que ni siquiera lo cuento en mi historial)
Liberty 1 - Baz 1

Pero después de ese pololeo nefasto (que no merece llamarse "pololeo"), conocí a otra persona (no le tengo seudónimo todavía, ya se vendrá) y él sí contaba como pololo.
Gané de nuevo.
Liberty 2 - Baz 1

Pero menos de un mes después de eso, me enteré de que Baz se había puesto a pololear con una chica de su Universidad.
Liberty 2 - Baz 2

Años después, mi relación llegó a su fin.
Liberty 2 - Baz 3
Y no lo voy a negar: sentí que había perdido.
Que Baz era feliz y yo no.
Él estaba acompañado y yo estaba sola.

Pero, por ahí me enteré (o más bien sospeché) que Baz ya no estaba en una relación. Me empecé a dar cuenta cuando la susodicha (sin seudónimo todavía) dejó de poner que le gustaba TODO lo que Baz ponía en su muro de Facebook, y tampoco había comentarios.

Entonces la cosa se quilibró:
Liberty 3 - Baz 3
EMPATE.

Habrá que ver que pasa en el tercer cuarto del partido "Bazerty"

jueves, 7 de noviembre de 2013

Reciclaje

El tema del reciclaje es algo súper de moda hoy en día.
No lo estaba tanto cuando en la época Bazerty, pero ser más verde no es exactamente a lo que va esto.

Me refiero al reciclaje en el amor.

Hay algunas frases que Baz me decía, que eran muy tiernas y del corazón.
(Ya establecimos que el hombre era romántico y cursi)
Y la verdad es que siempre me sentí muy afortunada por ser a quién le tocaba recibir tales frases y palabras.

Hasta un día X, años después de terminar cuando estaba de moda el tema del fotolog y decidí ver el suyo (de puro copuchenta, en realidad).
Vi cómo le dedicaba la foto posteada a un niña (que es su actual polola), diciéndole las mismas cosas que me decía a mí.
Exactamente las mismas.
Y no pude evitar, al leerlas, escuchar la voz de Baz cuando me las decía con todo el amor del mundo. 
Tampoco pude evitar escuchar cómo mi corazón se trizaba un poquito, casi imperceptiblemente en una esquinita. 

Me sentí un poco... ¿traicionada?
No. ¿Reemplazada?
En verdad sentí: que ya había dejado de importar. 
Y de la forma más literal que hay.

martes, 5 de noviembre de 2013

Terremoto

Cuando el 27 de febrero a eso de las 3:34 de la mañana el suelo se remeció bajo los pies de todos los chilenos, tuve la suerte de no estar sola.
Menos mal que estaba con mi hermano y mi mamá; porque, como magallánica, no habría sabido realmente qué hacer una vez que el balanceo se terminó. 

Después de bajar diez pisos en 3.7 segundos, nos vimos en la calle, rodeados de todos los habitantes de mi edificio.
Los celulares estaban caídos, y la comunicación era imposible.

Un par de horas después, cuando ya nos encontrábamos a salvo en otro edificio en un piso más bajo, y ya habíamos hablado con mi hermana que estaba en Viña, empezamos todos a tranquilizarnos.
Logré hablar con Lalo y Tali, y al hablar con ella no pude evitar preguntarle si había sabido de Baz.
Tali me dijo que no sólo Baz estaba bien, si no que había sido el héroe del terremoto en su edificio al ayudar a una vecina a salir de su casa forzando la puerta.

No voy a mentir: igual fue como "¡wow!"
Y también admitiré que sentí un tremendo alivio de que no le hubiese pasado nada.

Y no sé, quizás ahí fue que me di cuenta de que siempre Baz va a importarme.
Al menos cada vez que la tierra se mueva como si quisiera salirse de su eje, me preguntaré si él está bien. 

domingo, 3 de noviembre de 2013

Amenaza

Siempre me he preguntado: ¿por qué el sólo hecho de ser "la ex" me hace una amenaza para la nueva polola de mi ex? (En este caso Baz, claro)
O sea sí: mis piernas miden más de un metro, y no necesito rellenar mi sostén (si es que entienden lo que digo) pero ¿cómo voy a ser una amenaza?

Hablo con Baz... En realidad "hablar" es demasiado; chateo con Baz de vez en cuando... casi nunca. Le envío un e-mail por su cumpleaños en febrero y otro por Navidad. O a veces él me envía un e-mail por Navidad primero.
Y eso es todo.

¿Es eso realmente una amenaza?
Lo dudo.

Por otro lado, se entiende que quizás yo pueda ser vista como alguien peligrosa (uuuuuuu, ¡me gusta eso!, ser como una femme fatale), pero en el caso de Baz, da la sensación de que TODA mujer es una femme fatale con ganas de agarrarlo entre sus garras.

Al final tiene que ver con la percepción que tiene la polola actual de la ex.
Así que supongo que le agradezco a la susodicha por hacerme sentir bakán. Cuando en realidad no lo soy... tanto. Tal vez un poquito.

¡Gracias! :)

viernes, 1 de noviembre de 2013

¿Amigos? ¿Enemigos?

No: exes.

Cada vez que escucho a alguien decir que es amig@ de su ex, pienso "es que no se puede".
Un amigo es un amigo, alguien con quien uno se ríe, lo pasa bien, que quiere un montón y con quien te sientes cómoda en cualquier situación.

¿Se puede hacer eso con un ex?
Yo diría que no.

Pero ¿significa eso que son enemigos mortales?
¡Tampoco!
Qué confuso.

Me da la sensación de que cuando tienes una relación con alguien, ya nunca más se puede volver a lo que era.
Salvo que sea una relación donde no pasó demasiado y se quedaron en abrazos, topones y tomadas inocentes de mano, de verdad creo que todo cambia.
Es otro tipo de relación: tenemos amigos, enemigos, familia y exes.

Con Baz nos tomó años poder estar en un lugar cómodo donde los dos sentíamos que las cosas estaban tranquilas, pero yo jamás diría que somos amigos. 
No le cuento detalles de mi vida, no lo llamo cuando algo me pasa... pero podemos tener una conversación sin problemas.

Somos exes... amigos no.
Y cuando uno es un ex con alguien, siempre es un ex.

martes, 29 de octubre de 2013

I would never wish bad things...

... but I don't wish you well.
[Jamás te desearía cosas malas, pero no te deseo el bien]

¿Cómo se llama este fenómeno?

Me acuerdo de cuándo Baz me contó que estaba pololeando.
Yo llevaba casi un mes pololeando también, y nos reímos de la coincidencia. Le dije que le deseaba toda la felicidad del mundo y esperaba que su nueva relación fuera excelente.

Quise decirlo de verdad, en serio desearle lo mejor...
Pero por algún motivo, me sonó a la peor mentira de la historia.
¿Acaso yo no quería que fuera feliz?

Yo era feliz con otra persona. 
¿Por qué muy dentro de mí yo no le deseaba la misma felicidad?

Me sentí como la peor persona del universo.
Pero después me di cuenta de que es simplemente lo que pasa cuando una relación no termina demasiado bien.
Cuando quedan algunos cabos sueltos.
Uno quiere ganar. Ser el primero en ser feliz, ser el que dura más en su nueva relación, ser el vencedor. Ser "el buen ex".

No voy a mentir, esta sensación se demora años en irse.
Creo que me acompañó hasta que sufrí otra ruptura, y recién ahí pude pensar que la vida de Baz me daba lo mismo.

Que podía ser feliz si quería o infeliz si así elegía.

Al final del día importa uno y hey, yo soy feliz.


lunes, 28 de octubre de 2013

¿Y si...?

Admito que ya no juego eso.
Pero post-ruptura, definitivamente sí lo pensé muchas veces.

¿Cuál era el problema?
De alguna manera estaba segura de que las cosas se habrían terminado igual.
O tal vez no, pero ya daba lo mismo.

Creo que uno de los grandes privilegios que trae el transformarse en una ex, tiene que ver con básicamente fantasear cambiando el pasado.
O imaginando lo que podría haber sido el futuro.
Y por supuesto siempre salir ganando en cada escenario.

Y yo siempre ganaba en todos los escenarios, aun cuando sabía que preguntarme ¿Y si...? no era nada sano.
Es inevitable ¿no?

En un Mundo Z todavía estábamos juntos, llevábamos años de relación y todo era maravilloso.
Éramos la pareja sobre la que se escriben canciones del tipo "Hey there, Delilah".
Pero en un Mundo Y la cosa duró algunos años y terminó igual, y yo estoy con un mino increíble que me ama, y él ha tenido 3 pololas que le han puesto el gorro.

Y en el Mundo R(eal), habíamos terminado y eventualmente encontraríamos a otras personas.
Y así fue.

sábado, 26 de octubre de 2013

Amigos

Lalo y Tali eran mis mejores amigos.
Siempre estuvieron ahí: cada vez que discutía con mi mamá, cada vez que me sacaba una pésima nota y cada vez que terminaba una relación.

Pero cuando todo se acabó con Baz, sentí que me fallaron.
Que me abandonaron.
La verdad es que yo quedé como la mala de la película, por ser quien decidió terminar la cosa.
Y para ser honesta, yo no quería que se acabara para siempre.

Pero ¿cómo podía concentrarme en los idiomas del Indo-Europeo, La Ilíada y lo que escribía Santo Tomás de Aquino si no podía parar de pensar en Baz y en cuánto lo extrañaba?

Más encima, Baz consideraba a Tali su mejor amiga...
Todo fue un caos ese primer semestre de Universidad.
Todo fue un caos con mis amigos ese año, mejor dicho.

¿Y saben qué? Era lo que tenía que pasar.
Al final, me di cuenta de que la ruptura era algo que tenía que pasar sola, para poder decidir qué quería y cómo estaba realmente.

Y al final, estaba bien :)

viernes, 25 de octubre de 2013

Vuelo


Corría el año 2007 y Bazerty llevaba más de dos años terminado, cuando me encontré a Baz en el aeropuerto: los dos íbamos a viajar en el mismo avión de vuelta a nuestra ciudad de origen. 
Hablamos de nada en particular, y embarcamos en momentos distintos.
Él iba en la fila 8 y yo había quedado en la 20, y cuando se apagó la señal de los cinturones, me hizo un gesto y me fui a sentar con él.


(NOTA: Cuando nos bajamos del avión, Baz me pidió que no blogueara ni le contara a nadie que nos habíamos ido sentados juntos porque alguien en Santiago se podía sentir o enojar demasiado con él... no me preció algo bueno, pero dado que han pasado casi 8 años, siento que el estatuto de limitaciones ya venció)

Al principio estábamos los dos un poco incómodos (obvio), pero empezamos a hablar de la U, de la vida y de a poco empezamos a relajarnos.

Aproveché de pedirle perdón por haber terminado con él de manera tan súbita (ya es malo que te dejen, y definitivamente tiene que ser peor cuando no lo ves venir) y él me perdonó.

Creo que es fue lo máximo que conversamos y el vuelo sirvió para hacer las paces con todo el tema que teníamos.
Y ahora sólo me queda preguntarme si esa persona que iba a sentirse y enojarse todavía está en su vida, y si efectivamente está leyendo esto y se sintió o enojó.

Tal vez nunca lo sepamos...

martes, 25 de junio de 2013

Botado, botado, botado...

O más bien: dando bote.
La verdad es que en todo este rato en el que no me he hecho presente contándoles más cosas sobre lo que significa ser la ex de alguien, he estado pensando un montón.

(y así por ser, mi ausencia no tiene nada que ver con nada de mayor importancia que la Universidad y todo lo que significa acercarse al final del semestre, espero que entiendan)

Y he estado pensando que al final esto de ser una ex te da una especie de poder enorme: el de la experiencia.
Una se transforma como en una super-heroína que tiene todo este saber, toda esta información que puede (¡y debe!) compartir con el resto de las mujeres del mundo.

Experienchellissima, la superheroína de la experiencia, devota a compartir sus conocimientos sobre relaciones pasadas fallidas para que ninguna mujer vuelva a sufrir nunca más...

Qué bonito ¿no?
De ahora en adelante, ahora que ya saben mi historia con Baz, creo que ha llegado la hora de empezar a transmitir sabiduría... o mínimo, algunas cosas que nunca está demás tener presentes :)

martes, 14 de mayo de 2013

Quiebre

Creo que terminar una relación es una de las peores sensaciones del universo.
Ya sea uno quien termina o con quien se termina.

En mi caso con Baz, fui yo quien decidió que la tortura de la distancia era demasiado horrible.
Y sí, siempre voy a lamentar que haya sido por teléfono.
Pero si no qué ¿esperar meses y meses hasta poder finalmente vernos a la cara para hablar de eso?
No.

Yo pensé que nos íbamos a ver en Julio. 
Yo no quería que termináramos para siempre.
Yo no había dejado de quererlo.
Yo sólo quería estar tranquila y poder vivir sin sufrir cada minuto de cada día por tener a Baz tan lejos mío.

Me acuerdo de haber llorado sin parar, y haberme prácticamente arrastrado a la universidad al día siguiente con todos preguntándome qué me pasaba.

No me acuerdo qué dije o si dije algo.
Sólo sé que fueron unas semanas horribles hasta que finalmente llegó Julio y me fui de vuelta a mi casa.

Esperaba con tanta ansiedad que llegara Baz para poder verlo y conversar con él... quizás incluso explicarle que todavía lo quería, tal vez convencerlo de que se fuera a Santiago.

Pero Julio llegó, se fue... y Baz se quedó en Conce. 

miércoles, 1 de mayo de 2013

Terminó con...

... una llamada telefónica.

Y sé que es un cliché también.
Pero es difícil hablar las cosas cara a cara cuando estás a miles de kilómetros, y no podía esperar meses por la posibilidad de que pudiéramos vernos.

Yo era infeliz.
La relación no funcionaba si sólo podíamos hablar día por medio y enviarnos e-mails de vez en cuando.
No me llenaba.

No sé por qué todo el mundo pensó que fue súper fácil para mí terminar la relación.
Yo quería mucho a Baz, muchísimo... pero ¿saben lo difícil que era estar tan lejos de alguien que uno quiere tanto?
Una tortura.

No me acuerdo de cuánto duró la conversación, pero me pareció una eternidad.
Y el tiempo que me la pasé llorando y siendo un zombie por la U me pareció todavía más largo.

Ese fue el fin de Bazerty.
Y sí, todos me juzgaron y yo quedé como la mala de la película... ¡como si mi dolor no contara para nada!

Quizás fue el fin de nuestra relación como pololos, pero no fue el fin de nuestra relación.

domingo, 28 de abril de 2013

¿Por qué Baz?

Alguien me preguntó por qué escribo sobre Baz, si no es mi ex más reciente, y en realidad tampoco fue el ex más importante.

Quizás porque fue mi primer ex importante (no diré cuántos no importantes hay, pero Baz fue el primero que me importó), y porque ya ha pasado tanto tiempo, que da lo mismo lo que escriba sobre él (creo, espero... na, en verdad me da lo mismo XD)

Baz fue importante mientras estuvimos juntos y siguió siendo importante por mucho tiempo después de que termináramos.
Y eso fue hace siglos...

No sé si sea verdad eso de que tragedia + tiempo = comedia... pero ha pasado el tiempo suficiente como para sentarme y analizar nuestra relación, lo bueno y lo malo y reírme un poco del tema.
Y hacerlos reír a ustedes tal vez.
Espero.

Y bueno, por eso escribo sobre Baz y no sobre mi ex más reciente. Quizás si dejo pasar una cantidad razonable de años pueda hacerlo.
O tal vez no...

sábado, 20 de abril de 2013

Backstreet Boys


Aunque mi grupo preferido de todos los tiempos sean los Backstreet Boys y prácticamente cada CD que sacaron me llevan a cierta época de mi vida, debo admitir que ninguno me hace recordar a Baz.
No relamente.
¿Por qué hablamos de los BSB hoy día?
Porque es 20 de abril del 2013, lo que significa que llevan vigentes 20 años desde que se conformaron en 1993.
Y sí, se tomaron un par de breaks y cada uno hizo un par de trabajos como solista.
Pero ¿saben qué? Mientras tengan fans como yo, van a seguir vigentes por varios años más.

La cosa es que, aunque me acuerdo de un montón de canciones de cuando estaba con Baz, ninguna de los BSB.
Y no puedo evitar pensar que quizás era una señal.

Cuando el primer semestre de Universidad terminó (Julio del 2005) mi mamá me preguntó si quería un regalito por haber aprobado todos mis ramos y haber quedado en la nómina de honor de alumnos de mi Licenciatura.
Y yo elegí el recién lanzado al mercado "Never Gone" de los BSB, CD que escuché todas esas vacaciones de invierno.

O sea que en realidad el recuerdo que tengo de los BSB y Baz, es de cuando Bazerty llegó a su fin y ese CD me ayudó a superar todo el tema.

De nuevo: seguramente fue una señal.
Los dejo con una de mis canciones preferidas de todos los tiempos de los BSB. ¡Disfrútenla!


miércoles, 17 de abril de 2013

Tienes un e-m@il



Cuando uno tiene una relación a distancia, los e-mails pasan a ser la herramienta más útil para mantenerla. 

Tienen que entender que en el año 2005 no existía ni Facebook ni Skype, y los smartphones eran una idea del futuro (no había Viber, ni Line, ni whatsapp). De modo que los mails y el MSN eran lo único que teníamos a nuestra disposición.

¿Saben qué? No era suficiente.
Quizás si hubiésemos pololeado más tiempo antes de separarnos todo habría sido distinto.
Tal vez no, pero me gusta pensar que sí.

La mejor parte de mi día (por muy triste que suene) era llegar a mi casa y ver un mail de Baz.
Al principio eran muy detallados y llenos de cariño. Me contaba todo lo que hacía durante el día, sus ramos (aunque yo no los entendía), sus amigos, el mechoneo y la ciudad y lo distinta que era de todo lo que conocía.

Pero con el tiempo se acortaron mucho y sólo decían lo esencial. "Me fue bien en la prueba", "Ayer fui al cine", "Hace frío". Not good enough.

Creo que de a poco la relación empezó a desvanecerse, así como la frecuencia de contacto.
Hasta que de pronto no hubo más e-mails todos los días. Sólo un par a la semana.
Y de ahí todo fue cuesta abajo.

sábado, 13 de abril de 2013

Sin Comentarios

Hasta ahora, he hablado básicamente de lo que era mi relación con Baz.
Eran otros tiempos, yo tenía 9 años menos que ahora y la verdad es que a veces me pregunto como habría sido nuestra relación si hubiésemos sido de la época de ahora. 
Probablemente habríamos durado incluso menos.

No sé realmente si les parece interesante que hable de este tema.
Pero es necesario.
¿Por qué? se preguntarán.
Bueno, les diré yo, porque para poder hablar de lo que significa ser una ex, tengo que ponerlos al tanto de cómo era la relación que me hizo ser una ex.

Porque al final de cuentas, el tipo de ex que somos depende del tipo de pololos/as que fuimos en nuestro momento. ¿No creen?
No se preocupen para allá vamos.
Ya nos estamos acercando al final de Bazerty.

Ah, y me gustaría de vez en cuándo saber qué opinan de todo lo que les cuento.
Un comentario aquí o allá será bienvenido ;)

jueves, 4 de abril de 2013

Distancia

Cuando finalmente me vi instalada en Santiago, vivía con mis abuelos en una gran y antigua casa donde mi mamá y mis tíos habían crecido.
Y Baz estaba instalado en una pensión en Concepción.

Cuando empezó la Universidad, empezó la tortura.
Mi horario era horrible y llegaba a mi casa pasadas las ocho de la noche casi todos los días.
El invierno ese año empezó a mediados de marzo, y se me llovió la pieza.
Tali estaba viviendo en una pensión cerca de mi casa y me fue a hacer compañía un par de veces.


Pero yo echaba mucho de menos a Baz.
Y claro, odiaba que me preguntaran si estaba o no pololeando, porque eso significaba decir que sí, pero que el hombre estaba en Concepción.
Todos me miraban con una cara que demostraba tanto pena como risa. Nadie tenía fe en nuestra relación, y pronto ni yo la tuve.

Debo reconocer que Tali fue probablemente la única que insistía en que podíamos resolverlo todo.
Pero yo no estaba tan segura: la distancia lo estaba cambiando todo.