viernes, 3 de mayo de 2019

Lo que he aprendido de Tinder

Ya se van a cumplir 5 años desde la primera vez que bajé la aplicación de la llamita, y debo decir que nunca dejo de sorprenderme. 

Cosas que he aprendido de/por/gracias a/por culpa de Tinder:

1. Hay de TODO.
Desde hombres casados buscando a "la otra", hasta pollitos que quieren amigos porque son muy anti-sociales.
De vez en cuando además te topas con fotos íntimas, lo que normalmente significa el perfil de un escort; o gente ofreciendo sus servivios en otras áreas, lo que generalmente pasa cuando no saben usar LinkedIn.

2. La gran mayoría de los hombres son honestos con lo que quieren.
En MI experiencia (no aplica para todos, hablo de lo que me ha pasado a MÍ), nadie va a decirte que quiere algo serio sólo para conocerte. Van a ser siempre directos con lo que andan buscando.
Esto puede ir de un encuentro rápido, a múltiples citas o quién sabe qué más (a veces buscan esposa... así en serio)

3. Hay muchos "cachando qué onda"

El amigo de un amigo se los recomendó y quieren ver qué pasa.
O quedaron solteros y no tienen idea de cómo conocer gente nueva (me ha pasado)
(Muchas veces)
(Demasiadas quizás)
(O es que simplemente NUNCA aprendo)
(NO me juzguen)

4. Hay muchos despechados.
Desde engañados que buscan revancha, hasta aquellas pobres almas en pena que sólo buscan consuelo o un hombro sobre el cual llorar (me ha pasado).

(Sólo una vez)
(Al final volvió con la eX)
(Pobre pollo) 

5. Y muchos volviendo a las pistas. 
Después de llorar, cortarse el pelo, tatuarse y sabe dios qué harán los hombres cuando terminan una relación; muchos deciden navegar las turbias aguas de Tinder para volver a entrar en el juego.

6. Al final todos estamos básicamente en lo mismo.
Queremos conocer gente, salir, jotear, ver qué pasa; y juntarnos con nuestr@s amig@s para contarles cómo nos fue.
Y en eso sigo.

 [I'm back, bitches...]