domingo, 29 de marzo de 2015

Muy de mina

Así describe la mayoría de los hombres este humilde blog.
¿Y saben qué?
Sí, es un blog muy de mina.
¿Por qué?
Quizás porque soy mujer.
Y por eso mismo, escribo sobre temas que me interesan y creo que pueden interesar a otras mujeres.

¿Y qué tanto?

Lo que me da rabia/risa, es que las mujeres también los describen así.
Pero para ellas es algo positivo, es como decir "me identifico y por eso me gusta"

Pero los hombres lo dicen como algo malo.
Y yo no los pesco.

-¿Leíste mi blog?

-Es muy de mina-y miran con cara de reprobación.

¿Por qué "de mina" es algo malo?
Me niego a aceptarlo como un ofensa, suena más como una observación.
Y es una observación correcta.

SÍ, este blog es "muy de mina".
¿Y saben qué? Esa es precisamente la idea.

#GIRLPOWER

domingo, 22 de marzo de 2015

Mensaje en una Botella

Y no, no estoy hablando de la (muy, pero muy obviamente predecible y cursi) novela de Nicholas Sparks (pero igual vean la película ¡actúa Kevin Costner!); si no de un mensaje en una botella.
Así en serio.
Pero no como lo creen.

Normalmente lo que se ve es que se escribe algo a mano (eso es taaaan siglo pasado ¿no?... o sea no para mí, pero sí para el resto de los mortales) en un papel, se mete adentro de una botella de vidrio, y se lanza al océano.
Not bad.

Pero a mí se me ocurrió usar la idea para otra cosa.
Algo más práctico.

Hace rato (muuucho rato) que necesito superar a alguien.
¿Ya saben quién? ¿Se acuerdan? Si no, lean las últimas entradas a ver si cachan.
La cosa es que no tenía cómo tener un cierre.
¿Por qué? ¡Qué bueno que lo preguntan!
Porque aunque me rendí, le dije al susodicho que me rendí, y le escribí un mail hermoso de rendición que está casi para enmarcarlo; no fue capaz de responderlo.
Aun cuando yo le pedí que lo hiciera.
Para que el cierre fuera mutuo.
So... yeah.

Entonces, como en verdad uno igual necesita tiempo para superar a una persona, se me ocurrió una brillante idea.
En mi refrigerador encontré una botella de bebida sola, triste y abandonada.
Confesión: NO tomo bebida, esa debe haber quedado de mi cumpleaños... del año pasado o algo, onda en serio muy X encontrarla.
La cosa es que un día que vinieron amigas, empecé a escribir cosas en la botella con plumones de colores.
Cosas como "hace 10 años que no me gustaba nadie tanto como tú"; "siempre me gustó tu sonrisa y hacerte reír"; y (no podía faltar) "you're awesome". Confesiones del corazón de ese estilo, ya me entienden.

Y cuando ya casi no quedaba espacio para escribir las cosas que sentía por él; se me ocurrió la antes mencionada brillante idea: Cuando esta bebida se acabe (seguramente de aquí a unos meses más, porque -como ya dije- NUNCA tomo bebida), voy a botar la botella y se van a ir todos esos sentimientos.
Y se va a acabar todo.
Cierre.
Finalmente.

O sea, si lo piensan bien, es un mensaje en una botella.
No en, así como adentro; en así encima.

Así que estoy esperando que se acabe esa botella para botarla, y todo lo que siento se vaya a la basura con ella.
Y vamos bien.
We're halfway there.

jueves, 19 de marzo de 2015

Terminar lo que nunca empezó

A veces pasa que formamos toda una historia romántica en nuestras cabezas con una persona (#TrueStory), pensando que si realmente atraemos esas escenas de forma positiva, es posible que se realicen.
Ingenuos.

La verdad es que a veces no hay nada qué hacer.
Te gusta alguien, tú no le gustas.
Realmente, nada qué hacer.

Y puedes gritar al cielo preguntando "¿POR QUÉ? ¿POR QUÉ SEÑOR? ¡ÉL ES PERFECTO PARA MÍ! ¿CÓMO NO SE DA CUENTA DE LO FELIZ QUE LO PUEDO HACER?"
Pero no va a cambiar el hecho de que ya es tiempo de olvidarlo.
Move on.

Y lo triste (lo MÁS triste, si me lo preguntan), es que cuando finalmente logramos superar a esa persona, se siente como una ruptura.
Patético ¿no?
Inventamos toda una historia (prácticamente una novela de 7 tomos), en nuestras cabezas, y cuando nos damos cuenta de que estamos en un laberinto sin salida, tenemos que tirar la novela a la basura.
Los 7 tomos enteros.
Y puta que duele.

Pero lo que más duele, es que en realidad no estamos tirando nada de verdad.
Nada real.
Nada tangible, literalmente nada de nada de nada.
Ni siquiera son recuerdos, porque botamos una fantasía construida por nuestra pequeña princesa interna que quería un final feliz... o lleno de pasión y sexo, ustedes elijan.

Y si en verdad nunca hubo nada más que una imaginación muy activa, y tal vez (quizás) un par de poemas/historias secret@s dedicadas a nuestro amor; ¿cómo se supone que tengamos un cierre para poder superar el tema y movernos de ahí?
Y aquí está el quid del tema.
Si nunca empezó, nunca se acaba... salvo que encontremos la forma.

¿Se les ocurre alguna?
A mí sí... ya les contaré en la próxima entrada ;)

domingo, 15 de marzo de 2015

LevantaEgo

Mucha gente me comentó la entrada de ser un Calientasopas Emocional (no directamente en el blog, pero sí me lo comentan), y me preguntaron "¿Entonces tú qué eres?".
Lo pensé detenidamente un momento.
Aunque no tenía que pensarlo tanto.

El Otro Tipo me tenía ahí.
Sin hacer nada.
Simplemente yo estaba ahí, mirándolo (esperaba que disimuladamente) con ojos de perrito soñando una relación maravillosa con él.
Y él lo sabía.

La verdad es que no tengo muy claro qué fue primero: ¿me transformé en una levantaego y por eso él empezó a calentarme la sopa emocional? ¿o fue al revés y yo caí sin darme cuenta?

La cosa es que cuando se tiene este tipo de relación... no es realmente una relación, aunque te engañan (o ilusión, si prefieren) creyendo que eventualmente quizás sí lo será.
Y te quedas ahí, haciendo la mitad del corazón como en la foto.
Esperando que la otra persona haga la mitad que falta.
Pero eso no pasa.

Lo que pasa, es que el Calientasopas Emocional levanta la mano para completar el corazón... pero no hace nada más.
La deja ahí.
Y sigue respondiendo los mails, sigue saliendo contigo, sigue sonriéndote y tratándote bakán... pero nada más que eso.
Te tiene ahí.
Con la mano en el aire.
Con la mitad del corazón armado.
Y así te transformas en la Levantaego.

Que no te pase.
Si ya se te cansó el brazo de esperar que completen el corazón... bájalo.
¡No le levantes a nadie el ego, sobre todo si lo único que hacen es calentarte la sopa emocional!

[Dedicado a tod@s los que nos acalambró el brazo esperando... ¡con la sopa emocional casi hirviendo!]

jueves, 12 de marzo de 2015

Calientasopas Emocional

Cuando estaba un día cualquiera quejándome del Otro Tipo (que ya tan bien conocen), con una amiga, llegó un momento en que me dijo (prácticamente me gritó): "¡El weón es un calientasopas!"


Calientasopas: Dícese de la persona que provoca a otra, por lo general de manera física (entiéndase besos, abrazos, toqueteos varios), pero que luego no "termina lo que empieza" (abierto a debate, pero en general es la definición tradicional de la palabra)

Me entró ataque de risa, porque como nunca pasó nada de nada entre nosotros, no parecía realmente un adjetivo correcto para usar con él.
Entonces le pregunté a qué se refería.
Porque además, para qué vamos a andar con cosas, no es algo que normalmente se le diga a un hombre (machismo máximo, si me preguntan a mí)

Entonces mi amiga prosiguió su explicación:
"Le dijiste que te gusta.
Te dijo algo así como 'ok'.
No te dijo que le gustas.
Tampoco te dijo que NO le gustas.
Te dio una excusa (quizás aceptable) de por qué 'está en otra'.
Pero no se alejó de ti, como haría un tipo normal.
Siguieron saliendo.
¡Varias veces!
¿Y no hizo nada?
¿Nada de NADA?
¡CALIENTASOPAS!"

Obviamente no podía parar de reírme, en parte porque obviamente tiene sentido.
No me calentó la sopa de la forma tradicional.
Pero quizás sí a nivel de emociones.
Respondiendo mis mails.
Teniendo tallas internas... tradiciones... frases... etc.

Supongo que sí...
Es un calientasopas emocional.
Bueno, fue... ¿era?
Sólo espero que deje de calentarle la sopa emocional al resto de las mujeres que pasen por su vida.


[Dedicado a Pau M. por acuñar el término y aguantar mis quejas sobre el tema :)]

lunes, 9 de marzo de 2015

#MeGustas

¿Por qué la gente se asusta tanto cuando escucha esto?
O sea, así en serio: ¿Qué se imaginan cuando les decimos "me gustas"?
¿Te amo?
¿Quiero casarme contigo?
¿Voy a matarte y usar tu piel como ropa?

A juzgar por la reacción de mucha gente, pareciera que es eso lo que escuchan.

Esto viene de una foto que una amiga publicó en Instagram, donde dice: 
"Tú me gustas"*

*No te amo, no quiero que te cases conmigo y no me vas a gustar siempre. Simplemente me gustas. Así como me gusta ver el cielo. Podrías gustarme mucho tiempo como sólo hasta mañana.

Y mi amiga agrega "siempre lea la letra chica".
(Inteligente Chica)


O sea, en serio, ¿por qué la gente huye cuando les dicen esto?
Así como  lo veo tienen un par de opciones mucho más razonables que correr despavoridos en la dirección contraria (y dejar a la persona que les dijo tan lindas palabras, MUY confundida)

1. Ser honestos.
Lejos lo que más se aprecia, sobre todo cuando además se acompaña de amabilidad.
"Pucha... lo siento, pero no me gustas".
Listo.
Amable y directo.

2. Quizás, darle a la persona una oportunidad.
No porque no te guste ahora significa que nunca lo hará.
¿Por qué no arriesgarse y ver qué pasa?

En mi experiencia, siempre es mejor que sean honestos.
Lo que significa que me han rechazado algo así como el 98% de las veces que le he dicho a alguien que me gusta (incluyendo a Baz, a ISN y muchos otros)
Pero hey, es parte de la vida.

Así que ya lo saben: "Me gustas" no significa NADA MÁS que eso.
Me gustas.
Y ya.

[Dedicado a mi amiga Cami C, que posteó la foto en su Instagram que inspiró esta entrada]