viernes, 29 de noviembre de 2013

El Encuentro - Parte 1: Lo vi llegar...

Lo admito: me cambié 3 veces de ropa, y me preocupé de maquillarme de la forma más natural posible antes de salir de mi casa.
Y confieso que me tembló un poco la mano cuando quise ponerle llave a la puerta.
En la micro, me concentré en la canción que salió al azar en mi reproductor (ya bueno, lo admito: es un iPod) y eso me ayudó a calmarme un poco y bajar el nerviosismo. 

Llegué a la hora a acordada y me senté en una mesa cualquiera.
Cuando vi a Baz acercarse , juro que me sentí como si tuviera 17 años de nuevo.
No sólo por la sensación de esperar para verlo; si no también porque se veía exactamente igual que cuando teníamos 17. Juro que Baz no envejece.
(Dicho sea de paso, creo que yo tampoco pero supongo que quedará para que futuras generaciones lo decidan)

No pude evitar que mil recuerdos se me vinieran a la mente. Cuando yo le abría la puerta de mi casa y lo veía subir los peldaños de la entrada.
Cuando le abrían la puerta y sentía sus pasos por el pasillo.
Fue como volver al 2004 de un paraguazo. 

A medida que se fue acercando, por unos minutos todo lo vi en cámara lenta.
Me saqué los audífonos, sonreí y nos saludamos. Se sentó frente a mí y ese fue sólo el comienzo de una interesante tarde.

Les dejo la canción que finalmente logró calmarme.
Gracias, Europe.


martes, 26 de noviembre de 2013

(e)Xbox

Cuando digo que tengo una exBox, es eso: una caja donde tengo todo lo que tiene que ver con los eX. 
Mucha gente (en su gran mayoría hombres) me miran con cara de incredulidad. ¿Qué mujer tiene una eXboX? O sea, supongo que muchas. Pero si me conocieran (y creo que en cierto nivel ya lo hacen), no soy esa mujer. 

La verdad es que mi exBox, sólo tiene algunas cosas de Baz.
Básicamente porque el pololo que vino después de él ocupó mucho tiempo de mi vida, por lo que actualmente ahora ocupa gran parte de mi bodega.

Pero la última vez que abrí mi exBox, había un par de regalos que Baz me había hecho, y muchos no había querido usar porque lo encontraba nada qué ver.

Me acuerdo de haber revisado la caja por todos lados, buscando una carta que Baz me había escrito, justo antes de que él se fuera a Concepción y yo me viniera a Santiago.
Pero no la encontré.
Y después me acordé: el ex que vino después de Baz, me pidió que la botara o la quemara, porque nunca entendió para qué la quería conservar.

No voy a mentir que me arrepiento de haberla quemado:
1. Porque casi quemo un paño de cocina en el ritual.
2. Porque ese tipo de cosas vale la pena guardarlas para después. Aunque sea por valor sentimental, para recordar lindos momentos.

Así que Baz, si estás leyendo esto: lo siento.
Me habría encantado conservar tus (románticas y un poco cursis XD) palabras.

sábado, 23 de noviembre de 2013

Inocente café

Algunos dirían que eso no existe: "Inocente café" es un invento de la gente.

Pero en este caso, juro que es un café y nada más, en un lugar público a plena tarde.
Todo empezó con un sueño (típico), donde estaba Baz (obvio), y no me pude resistir al impulso de mandarle un whatsapp que decía (literalmente) "Hola! anoche soñé contigo, y sólo quería chequear que estás bien :)". Nada demasiado eufórico, porque siempre había vivido bajo la creencia de que su polola era un poco psycho. (Aunque tal vez sólo estaba en mi cabeza, queriendo pensar que me odiaba sin razón... sin razón) 

[En realidad no la conozco, quizás sea encantadora, ¡quizás incluso podríamos ser amigas!... or not]

Lo que no me esperaba era que la conversación siguiera y siguiera, y quedara en una invitación a tomar café por ahí.
De él a mí, él lo sugirió.
Un inocente café. 

Ahora, sólo quiero aclarar lo siguiente: NO ES UNA CITA.
Por mucho que mis amigas (Tali y Myla) insistan en que sí lo es. 

Mi predicción es la siguiente: Tomar café, ponernos al día, y más que seguro sacar más entradas para contarles.
Y punto.
O bueno, tal vez sea un inocente chocolate caliente, depende de cómo vaya a estar el clima.
¡Los mantendré informados!
10-4

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Hacer Lala

En el 2004 (el año de Bazerty), se dio a conocer la cantante Ashlee Simpson (hermana de Jessica Simpson), y su segundo single fue "La la". Que en verdad no decía mucho, salvo el coro: "You make me wanna la la".
Con Baz lo tradujimos como "Me hacer querer hacer la la".

Me acuerdo de haber pasado horas y horas conversando con Baz sobre lo que podría significar "hacer la la".
¿Cuándo uno hace la la?
¿Cuándo no se podría hacer lala?
¿Es bueno hacer la la?

La verdad es que no estoy demasiado segura, pero creo que quedamos en que "hacer la la" podía ser como un eufemismo de "hacer feliz".
Así como "tú me haces ser feliz". O algo así.

No sé, igual me acuerdo de Baz cada vez que escucho la canción.
Que es quizás una vez al año (creo que ya no es tan popular).

¡Les dejo la canción!
¿Qué creen ustedes que sea "hacer la la"?


lunes, 18 de noviembre de 2013

Feliz Cumpleaños...

... ¡Tali!
Oh sí, hoy mi querida amiga Tali cumple X años.
Normalmente lo diría, pero no estoy segura de que pueda abiertamente hablar de la edad de mi amiga.

Esta no es la primera (ni será la última) vez que pasemos su cumpleaños en ciudades diferentes.
Ella está en Punta Arenas y yo estoy en Santiago.
Yo estoy aquí y ella está allá.

:( oh.
De pronto me bajó toda la pena.

Y es que todavía me acuerdo de cuando celebramos su cumpleaños en su departamento en Santiago (y el mío también, dicho sea de paso), con globos y torta y gorritos y serpentina.
Creo que al final no llegó mucha gente, pero yo hice todo lo posible porque lo pasáramos súper (sobre todo Tali, en su día).

Así que espero que donde sea que celebre su cumpleaños esta vez, la traten como se debe, y la atiendan como se merece :)

¡Te quiero, amiga! :D

viernes, 15 de noviembre de 2013

Patrones

Honestamente, a medida que iba creciendo y teniendo experiencias de vida, nunca pensé que tenía realmente un "tipo" de hombre. 
Excepto claro, el que está ultra herido y uno quiere rehabilitar.
Basura.

Pero cuando de pronto te sientas analizar las mentes de los hombres con los que alguna vez tuviste una relación (un relación, no relaciones; no malinterpreten la dulce alma de quien escribe) a veces se pueden encontrar ciertos patrones.

En mi caso, el patrón fue fácil de descifrar: INGENIEROS.
Me encantan los ingenieros, esos bien mateos, idealmente con lentes y bien cuadrados (ellos, no los lentes). Para poder descuadrarlos un poco.
No lo puedo evitar, me fascinan los con pinta de nerd.
Aunque supongo que ahora también podríamos llamarlos hipsters. ¿O es eso too mainstream?

La cosa es que Baz es ingeniero, y yo estudié Literatura (sí, con L mayúscula).
Y eso funcionaba.
Cuando terminamos, empecé a preguntarme qué tipo de hombre llegaría a mi vida.
Sorpresa: un ingeniero (aún sin seudónimo, se aceptan sugerencias).

Pero no fui la única que repitió un patrón: la polola de Baz es (redoble de tambores) Licenciada en Literatura.

¿Coincidencia?

Supongo que quedará para las futuras generaciones a decidir.
Pero creo que los patrones son simplemente colchones sobre los que nos acostamos emocionalmente durante nuestras relaciones (intrerpersonales, no confundir) para sentirnos cómodos.

Los ingenieros son mi colchón.

martes, 12 de noviembre de 2013

Myla

Supongo que no pensaron que mis únicos amigos eran Lalo y Tali.
Porque también estaba Myla.
Y Myla había estado ahí (y sigue ahí... aquí) desde primero medio cuando nos conocimos a la tierna edad de 14 años, antes de Baz, antes de Tali incluso (pero después de Lalo)

Debo decir que Myla llegó a mi vida en el momento justo, cuando necesitaba urgente una amiga.
Digamos que Lalo había estado siempre, pero no era suficiente. Sobre todo a esa edad.

Myla llegó justo antes de que los hombres se transformaran en un tema.
Y aunque nuestra amistad se reforzó después de que terminara con el primer pololo que tuve (llamémoslo "El Despreciable 1", D1 para abreviar), estuve muy contenta de poder contar con su amistad de ahí en adelante.

Me acuerdo de que una vez la mamá de Myla me dijo "ella siempre va a ser leal contigo, porque he visto cómo se tratan y como ha crecido su amistad".
¿Saben qué? Tenía razón.

Lo crean o no, las únicas peleas que he tenido algunas con Myla, fueron por... (adivinen) ¡BAZ! (¿adivinaron?) y fueron justo después de que termináramos.
Lo que pasa es que (curiosamente), mis amigas también eran amigas de Baz.
¿Coincidencia?
Tal vez él se hizo amigo de ellas para poder acercarse a mí (chan chan chan) o tal vez no. Nunca lo sabremos.

Pero años después de que Bazerty se acabara, puedo decir que Myla sigue a mi lado.
Y de Baz.
Pero a veces me gusta pensar que está secretamente alentando más al team Liberty.

Love you, Myla!

domingo, 10 de noviembre de 2013

Tatuaje

Tengo 3 tatuajes (sorpresa), que me he hecho en un período de 4 años, y estoy segura de que habrá más a medida que pasa el tiempo.
Siempre quise tener al menos uno.
Cuando estaba en el colegio me dibujaba los brazos, y todos los veranos me hacía tatuajes de henna, esperando poder cumplir la edad legal para hacerme uno de verdad.

Obviamente mi mamá fue la primera en saltar diciendo que me iba a dar SIDA (siempre) y que si me iba presa me iban a poner en la misma celda que los asesinos y violadores.
Porque obvio, yo iba a cometer un crimen, y obvio, me iban a meter en una cárcel de hombres (lógico).

Dejando todos los prejuicios aparte, no me hice un tatuaje hasta los 22. Ya estaba segura, y había pasado horas metida en google buscando una imagen que de verdad me convenciera.
Así que fui a un estudio sugerido por una prima (a la que aproveché de conocer en el local),y ella me acompañó mientras nos conocíamos durante las dos horas que se demoraron en hacer permanente la tinta en mi espalda.

Confesión: No pude evitar acordarme de Baz.
Me explico: Cuando estábamos pololeando, un día X empezamos a conversar sobre los tatuajes y lo que nos haríamos. Yo nunca dije nada definitivo, porque nunca lo había pensado realmente (sólo sabía que quería un tatuaje).
Pero Baz lo tenía súper claro: me habló de un mito nórdico en el que a alguien (quizás haya sido Thor, pero no quiero perderme en estereotipos) lo bañaban en líquido de inmortalidad, pero justo le caía una hojita de un árbol en la espalda, y ese era su punto débil.
Era como la versión nórdica de Aquiles, supongo.
Entonces Baz quería tatuarse esa hoja en la espalda.

Creo que nunca lo hizo, en verdad no lo sé.
Y cuando realmente lo pienso, encuentro que una hojita es como... no sé, una mariposa.
¿Tiene sentido? En verdad, mejor si no se hace nada, además que en su espalda (el hombre era MUY alto y ancho de hombros) seguramente parecería un lunar amorfo.
Oh well...


NOTA: lo busqué en wikipedia y no es Thor, fue Sigurd. Y se baña en sangre de dragón, lo que lo hace invulnerable, pero no inmortal.

viernes, 8 de noviembre de 2013

Marcador

Pasa algo extraño después de que se pololea con alguien, se termina, y después se empieza a pololear con otra persona.
Muchas veces se siente como si la primera persona en pololear después del quiebre, ganara.
1 - 0.
En nuestro caso, gané yo. Pololié primero.
Liberty 1 - Baz 0
Pero, resultó siendo un asco de pololo (el peor de la historia, tan malo que ni siquiera lo cuento en mi historial)
Liberty 1 - Baz 1

Pero después de ese pololeo nefasto (que no merece llamarse "pololeo"), conocí a otra persona (no le tengo seudónimo todavía, ya se vendrá) y él sí contaba como pololo.
Gané de nuevo.
Liberty 2 - Baz 1

Pero menos de un mes después de eso, me enteré de que Baz se había puesto a pololear con una chica de su Universidad.
Liberty 2 - Baz 2

Años después, mi relación llegó a su fin.
Liberty 2 - Baz 3
Y no lo voy a negar: sentí que había perdido.
Que Baz era feliz y yo no.
Él estaba acompañado y yo estaba sola.

Pero, por ahí me enteré (o más bien sospeché) que Baz ya no estaba en una relación. Me empecé a dar cuenta cuando la susodicha (sin seudónimo todavía) dejó de poner que le gustaba TODO lo que Baz ponía en su muro de Facebook, y tampoco había comentarios.

Entonces la cosa se quilibró:
Liberty 3 - Baz 3
EMPATE.

Habrá que ver que pasa en el tercer cuarto del partido "Bazerty"

jueves, 7 de noviembre de 2013

Reciclaje

El tema del reciclaje es algo súper de moda hoy en día.
No lo estaba tanto cuando en la época Bazerty, pero ser más verde no es exactamente a lo que va esto.

Me refiero al reciclaje en el amor.

Hay algunas frases que Baz me decía, que eran muy tiernas y del corazón.
(Ya establecimos que el hombre era romántico y cursi)
Y la verdad es que siempre me sentí muy afortunada por ser a quién le tocaba recibir tales frases y palabras.

Hasta un día X, años después de terminar cuando estaba de moda el tema del fotolog y decidí ver el suyo (de puro copuchenta, en realidad).
Vi cómo le dedicaba la foto posteada a un niña (que es su actual polola), diciéndole las mismas cosas que me decía a mí.
Exactamente las mismas.
Y no pude evitar, al leerlas, escuchar la voz de Baz cuando me las decía con todo el amor del mundo. 
Tampoco pude evitar escuchar cómo mi corazón se trizaba un poquito, casi imperceptiblemente en una esquinita. 

Me sentí un poco... ¿traicionada?
No. ¿Reemplazada?
En verdad sentí: que ya había dejado de importar. 
Y de la forma más literal que hay.

martes, 5 de noviembre de 2013

Terremoto

Cuando el 27 de febrero a eso de las 3:34 de la mañana el suelo se remeció bajo los pies de todos los chilenos, tuve la suerte de no estar sola.
Menos mal que estaba con mi hermano y mi mamá; porque, como magallánica, no habría sabido realmente qué hacer una vez que el balanceo se terminó. 

Después de bajar diez pisos en 3.7 segundos, nos vimos en la calle, rodeados de todos los habitantes de mi edificio.
Los celulares estaban caídos, y la comunicación era imposible.

Un par de horas después, cuando ya nos encontrábamos a salvo en otro edificio en un piso más bajo, y ya habíamos hablado con mi hermana que estaba en Viña, empezamos todos a tranquilizarnos.
Logré hablar con Lalo y Tali, y al hablar con ella no pude evitar preguntarle si había sabido de Baz.
Tali me dijo que no sólo Baz estaba bien, si no que había sido el héroe del terremoto en su edificio al ayudar a una vecina a salir de su casa forzando la puerta.

No voy a mentir: igual fue como "¡wow!"
Y también admitiré que sentí un tremendo alivio de que no le hubiese pasado nada.

Y no sé, quizás ahí fue que me di cuenta de que siempre Baz va a importarme.
Al menos cada vez que la tierra se mueva como si quisiera salirse de su eje, me preguntaré si él está bien. 

domingo, 3 de noviembre de 2013

Amenaza

Siempre me he preguntado: ¿por qué el sólo hecho de ser "la ex" me hace una amenaza para la nueva polola de mi ex? (En este caso Baz, claro)
O sea sí: mis piernas miden más de un metro, y no necesito rellenar mi sostén (si es que entienden lo que digo) pero ¿cómo voy a ser una amenaza?

Hablo con Baz... En realidad "hablar" es demasiado; chateo con Baz de vez en cuando... casi nunca. Le envío un e-mail por su cumpleaños en febrero y otro por Navidad. O a veces él me envía un e-mail por Navidad primero.
Y eso es todo.

¿Es eso realmente una amenaza?
Lo dudo.

Por otro lado, se entiende que quizás yo pueda ser vista como alguien peligrosa (uuuuuuu, ¡me gusta eso!, ser como una femme fatale), pero en el caso de Baz, da la sensación de que TODA mujer es una femme fatale con ganas de agarrarlo entre sus garras.

Al final tiene que ver con la percepción que tiene la polola actual de la ex.
Así que supongo que le agradezco a la susodicha por hacerme sentir bakán. Cuando en realidad no lo soy... tanto. Tal vez un poquito.

¡Gracias! :)

viernes, 1 de noviembre de 2013

¿Amigos? ¿Enemigos?

No: exes.

Cada vez que escucho a alguien decir que es amig@ de su ex, pienso "es que no se puede".
Un amigo es un amigo, alguien con quien uno se ríe, lo pasa bien, que quiere un montón y con quien te sientes cómoda en cualquier situación.

¿Se puede hacer eso con un ex?
Yo diría que no.

Pero ¿significa eso que son enemigos mortales?
¡Tampoco!
Qué confuso.

Me da la sensación de que cuando tienes una relación con alguien, ya nunca más se puede volver a lo que era.
Salvo que sea una relación donde no pasó demasiado y se quedaron en abrazos, topones y tomadas inocentes de mano, de verdad creo que todo cambia.
Es otro tipo de relación: tenemos amigos, enemigos, familia y exes.

Con Baz nos tomó años poder estar en un lugar cómodo donde los dos sentíamos que las cosas estaban tranquilas, pero yo jamás diría que somos amigos. 
No le cuento detalles de mi vida, no lo llamo cuando algo me pasa... pero podemos tener una conversación sin problemas.

Somos exes... amigos no.
Y cuando uno es un ex con alguien, siempre es un ex.