domingo, 3 de noviembre de 2013

Amenaza

Siempre me he preguntado: ¿por qué el sólo hecho de ser "la ex" me hace una amenaza para la nueva polola de mi ex? (En este caso Baz, claro)
O sea sí: mis piernas miden más de un metro, y no necesito rellenar mi sostén (si es que entienden lo que digo) pero ¿cómo voy a ser una amenaza?

Hablo con Baz... En realidad "hablar" es demasiado; chateo con Baz de vez en cuando... casi nunca. Le envío un e-mail por su cumpleaños en febrero y otro por Navidad. O a veces él me envía un e-mail por Navidad primero.
Y eso es todo.

¿Es eso realmente una amenaza?
Lo dudo.

Por otro lado, se entiende que quizás yo pueda ser vista como alguien peligrosa (uuuuuuu, ¡me gusta eso!, ser como una femme fatale), pero en el caso de Baz, da la sensación de que TODA mujer es una femme fatale con ganas de agarrarlo entre sus garras.

Al final tiene que ver con la percepción que tiene la polola actual de la ex.
Así que supongo que le agradezco a la susodicha por hacerme sentir bakán. Cuando en realidad no lo soy... tanto. Tal vez un poquito.

¡Gracias! :)

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