miércoles, 29 de enero de 2014

Piropéame & Muere

Tal cual.

No es que no me guste que me digan que me veo bien (sobre todo cuando hago el esfuerzo) pero si a alguien se le ocurre decirme que "soy linda"... se me cae la cara tres metros y pongo mi famosa cara de doberman enchuchado.

La verdad es que no sé de dónde me viene, pero una rabia ciega empieza a subirme desde el estómago hasta la cabeza, poniendo en alerta todo lo que toca a su paso.

Creo que Baz, quizás de manera inconsciente, sabía de esto.
No porque nunca me dijera cosas lindas (ya establecimos que el hombre era bastante, casi excesivamente cursi); si no porque siempre tenía la delicadeza de añadir "eres hermosa... para mí".

Por algún motivo, si se añade esa pequeña especificación, el piropo pasaba directo a mi casillero marcado como "ego", lo agradecía y seguía con mi vida.

Pero si la persona en cuestión (aunque fuese un pololo) sólo me decía "eres... [insertar adjetivo referente a atractivo físico]", el efecto mencionado anteriormente se detonaba.
Repito: no sé por qué.
Y es una reacción que me acompaña hasta el día de hoy.
Pero claro, si una mujer me dice algo así, sonrío y devuelvo el cumplido con una gran sonrisa :D mientras agradezco.

Así que ya lo saben: cualquier cumplido (si son hombres) deberá estar acompañado de la especificación "para mí" o "según yo" o "a mis ojos".
Si no, prepárense para morir.
O para mi cara de doberman.
Y corran.

No hay comentarios:

Publicar un comentario